Sí, siempre repito lo mismo, pero elegir bien el champú y el acondicionador es lo más importante para el cuidado del cabello. Lávate el pelo cada dos días, sobre todo si haces deporte y sudas. Igual de malo es lavarlo a diario que muy poco.
No tengas prisa en aclararte la mascarilla, déjala un mínimo de 15 minutos y si puedes envuelve la cabeza con una toalla húmeda caliente para multiplicar su efecto. Si no tienes tiempo, aplícate un buen acondicionador.
Seguimos teniendo la sensación de que cuanto más frotamos el cabello, más limpio quedará y más tiempo nos durará. Gran error. Precisamente es todo lo contrario, si lavamos el cabello con un suave masaje evitaremos activar las glándulas sebáceas y podrás alargar más los lavados.
Todos sabemos que para conseguir volumen necesitamos aplicar mucho producto, eso hace que se ensucie mucho. Coge una toalla de algodón, y una vez has acabado de secar, pégala al cuero cabelludo y da giros de 360º. Dos a la derecha y dos a la izquierda. Así es como se consigue un crepado ligero y muy efectivo. Aahora sólo queda colocar en el cabello un poco de champú en seco o laca y listo.
Para un buen cuidado del cabello es imprescindible mantener la cutícula del cabello bien sellada. Trabaja con las manos cuando desenredes el pelo con el acondicionador o la mascarilla. Con este truco se consigue más brillo, más suavidad, menos rotura y mucho más control si lo tienes encrespado.
El secador iónico es una herramienta imprescindible para el cuidado del cabello. Esta tecnología descompone las moléculas del agua que hay en el pelo húmedo, convirtiéndolas en micropartículas que hidratan el cuero cabelludo y la fibra capilar. Prepárate para disfrutar del mejor tratamiento que existe. Lo secarás más rápido, tendrás el pelo más brillante, sano, más manejable, mucho más hidratado. Además tiene efecto bactericida. ¿Se puede pedir más?
Existen tratamientos que en tan solo una aplicación a la semana te devuelven la vitalidad, el brillo y la lexibilidad. Sus resultados se mantienen durante 5 lavados.
Si tienes el cuero cabelludo sensible debes evitar champús con detergente, parabenos, sulfatos o siliconas, así como el agua calcárea (para ello ya existen grifos que disminuyen el exceso de cal en el agua). Además, evita el agua muy caliente así como aplicar calor directo en el cuero cabelludo. Con estas sencillas pautas mejorará en pocos días.
El azúcar es el mejor aliado si tienes picores después del tinte. Tan sencillo como aplicar una cucharada de café llena de azúcar en el bol donde hayas preparado el tinte. Se acabaron los picores y molestias.
De los mejores productos para el pelo, el champú y acondicionador dos en uno se lleva la mejor nota. Es importante que este producto no lleve detergente. Te sorprenderá lo que es capaz de hacer en tan sólo un lavado.
Para evitar que se parta el cabello debes dejar YA de peinarlo en mojado. Seca el cabello sin antes haberlo desenredado. Direcciónalo siempre hacia el suelo y ayúdate con las manos. Cuando hayas acabado de secar el cabello, estará totalmente desenredado y sin haberlo forzado con peines ni cepillos.
Si te levantas de buena mañana con el pelo encrespado o la piel enrojecida e irritada, aquí tienes la solución: cambia las fundas de tu almohada por unas de satén. Además, con este material te levantarás peinada cada mañana. ¡Yo ya tengo la mía!
¿Conoces el Fresh Cut de Living Proof? Es una loción ligera que cierra al instante las puntas abiertas (como una cremallera) para mantener el cabello sano y que se vea y se sienta como recién cortado. Cuando lo aplicamos en las puntas, se introducen unas cápsulas con carga iónica positiva que se unen a estas áreas dañadas. ¡Pruébalo y alucinarás con el cambio!
Escoger el champú y el acondicionador dependiendo del momento del año y del estado en que se encuentra tu pelo es imprescindible. Y es que cada época del año necesita unos cuidados diferentes. A partir de los 40 elige una línea anti-edad ya que estas líneas nutren y restauran el brillo de la juventud, suavizando además el cabello seco, quebradizo o envejecido. Entre sus componentes están el extracto de baobab, la flor de loto y hasta 20 aminoácidos diferentes con un poder antioxidante para el cuero cabelludo.
Uno de los indicadores más evidentes de envejecimiento del cabello son las canas. Aparecen porque los melanocitos que se encargan de fabricar el pigmento para nuestro cabello reducen su actividad y, poco a poco el pelo acaba por ser completamente blanco. Si quieres cubrirlas, usa una coloración sin amoniaco, sin fragancias, sin niquel y con ingredientes veganos que rejuvenece y cuida tu cabello.